Estados Unidos. El juez federal de EEUU, Emmet Sullivan, ordenó el pasado miércoles al gobierno del presidente Donald Trump que detuviera la expulsión de niños migrantes que cruzan solos la frontera sur del país.
La orden judicial busca ponerle un alto a las políticas antiinmigrantes del mandatario norteamericano a través de las cuales ha provocado la deportación de miles de niños y niñas antes y durante la pandemia por el nuevo coronavirus, Covid-19.
El juez Sullivan emitió un recurso preliminar el cual es producto de varias solicitudes de grupos de defensores de los derechos humanos y de los inmigrantes que demandaron al gobierno de EEUU por expulsar a los menores antes de que pudieran solicitar asilo u otro tipo de protección.
Según abogados, los padres de más de 600 niños migrantes no pueden ser encontrados
La Administración Trump ha expulsado a más de 147 mil personas desde el pasado mes de marzo, entre ellos alrededor de 8 mil niños y niñas no acompañados de sus padres. Las autoridades emitieron una declaración de emergencia en la que se impide a los niños migrantes permanecer en el país.
Los agentes fronterizos obligaron a que muchos de los niños y niñas migrantes regresaran inmediatamente a México, sin darles posibilidad de pedir asilo, otros quedaron detenidos en centros de detención u hoteles.
De acuerdo con, Lee Gelernt, abogado de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés), “esta medida enviaba a miles de niños de regreso al peligro sin audiencia”.
Políticas de inmigración de Biden: visas de empleo, reunificar familias, facilitar asilo.
Por su parte, el gobierno del presidente Trump ha argumentado en los tribunales que la expulsión de los niños y niñas que han cruzado la frontera es para proteger de la propagación del coronavirus a agentes fronterizos y a los inmigrantes detenidos.