Imagen de archivo de una audiencia a los tres exdirigentes estudiantiles. Fotografía de Diario La Prensa.
Tras cinco años de litigio legal, tres exlíderes de movimientos estudiantiles de la universidad pública en Honduras han sido condenados por los delitos relacionados a acciones de protesta en contra de la privatización del Alma Máter y abusos de autoridad del rector saliente.
La condena fue confirmada por la Asociación por la Democracia y los Derechos Humanos de Honduras (ASOPODEHU), organismo que se enteró la semana pasada que los ahora profesionales fueron sentenciados por el ilícito de detención ilegal de bienes públicos.
Los condenados son los exlíderes estudiantiles Cesario Padilla, Sergio Ulloa y Moisés Cáceres, cuyo proceso inició en el 2015 luego que la exrectora Julieta Castellanos los denunciara ante el Ministerio Público por las constantes protestas que organizaban en su contra.
Aunque Castellanos dejó su cargo tras una serie de manifestaciones y críticas, el litigio continuó por tres años y la condena se mantuvo oculta hasta la semana pasada.
Según el medio digital Pasos de Animal Grande, desde octubre del 2019 se tenía la sentencia en contra de los tres exlíderes universitarios, pero fue hasta finales de agosto del 2020 que ha sido plasmada en papel.
Son tres años de prisión, trabajos forzados en la cárcel, suspensión de sus derechos y pago por supuestos daños a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) la condena de los ciudadanos.
El medio local ha enfatizado que hasta la fecha el centro de estudios superior no ha comprobado cuáles fueron los daños ocasionados por los exlíderes estudiantiles que ahora deberán cancelar un monto que no ha sido detallado.
Uno de los afectados, Cesario Padilla, quien se encuentra con medidas y que actualmente es defensor de derechos humanos, al enterarse de la sentencia dijo que no callarán ante los abusos.
Los ahora sentenciados aún no han sido notificados de resolución, firmada y sellada por la jueza Enilda Geraldina Mejía.
