Un estudio científico ha revelado que el agua es mucho más antigua de lo que se pensaba, y que pudo contribuir a la constitución de las primeras galaxias.
De acuerdo con la investigación, publicada en la revista Natura Astronomy, el agua podría haberse formado por primera vez entre 100 y 200 millones de años después del Big Bang.
"El agua podría existir mucho antes de lo que se pensaba, y pudo ser un constituyente clave de las primeras galaxias", agrega el estudio que ha generado algunos comentarios referentes a la Biblia.
Algunos teólogos han señalado que la revelación de que el agua es mucho más antigua de lo que se pensaba podría hacer relación a un verso de la Biblia sobre la creación del mundo.
"La tierra estaba desordenada y vacía, las tinieblas cubrían la faz del abismo, y el espíritu de Dios se movía sobre la superficie de las aguas", cita el primer capítulo de Génesis.
"Al enfriarse ese oxígeno gaseoso y mezclarse con el hidrógeno circundante que dejaron las supernovas, se pudo formar agua en estado gaseoso -en forma de vapores-, que se acumularía principalmente en forma de disco", lo que revelaría que el agua es más antigua de lo que se piensa.
Al respecto, se reveló que en la primera simulación, los autores comprobaron que la masa de agua alcanzaba cantidades equivalentes aproximadamente a la cienmillonésima o millonésima parte de una masa solar entre 30 y 90 millones de años después de la supernova.
En la segunda, la cantidad de agua alcanzó aproximadamente 0,001 masas solares al cabo de 3 millones de años.