El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha sido claro al indicar que el alto al fuego por 60 días es una preparación para una guerra intensa.
Las declaraciones del funcionario israelí han generado polémica en la comunidad internacional, destacando que Netanyahu está utilizando la tregua para preparar a su ejército, no por una paz verdadera.
"¿Qué haremos durante el cese al fuego? Primero que todo, nos rearmaremos. Refrescaremos las fuerzas y nos rearmaremos con una capacidad de producción interna enorme", dijo el político de Israel sobre sus intenciones.
Agregó que Estados Unidos (EEUU) les proveerá nuevo armamento, el cual estaba suspendido por la guerra intensa que ha emprendido en contra de Hamas y Hezbollah.
Netanyahu señaló que la tregua con el grupo militar libanés se firmó porque ya habían cumplido sus objetivos, dejando entrever que fue su gobierno el más beneficiado con la guerra.
"Golpearemos a Hezbollah con una fuerza contundente, y mucho más que eso, crearemos las condiciones para el regreso de nuestros residentes en el norte", dijo el primer ministro israelí.
El acuerdo de paz, que generó expectativa a nivel mundial, se aprobó el miércoles por un periodo de transición de 60 días que se espera se extienda, aunque EEUU quiere un convenio que sea a largo plazo.
Con las declaraciones del funcionario israelí se pone en duda si el alto al fuego podrá lograr un cese a la guerra intensa que el ejército hebrero ha iniciado en contra de los grupos militares, considerados terroristas por Occidente.