Imagen de Telemundo / Mark Whaley
Los trabajadores en su mayoría de origen latino y considerados esenciales se encuentran en una encrucijada durante la pandemia: ¨Enfermarse de Covid-19 o perder sus empleos¨.
La necesidad de llevar sustento a sus hogares y el miedo al contagio mantienen en incertidumbre a los trabajadores hispanos que viven en EEUU, la nación más afectada por el contagio.
Uno de los casos que ha consternado a la comunidad latina es el del mexicano Juan Delgado, quien se infectó de Covid-19 y lleva más de un mes intubado luchando por su vida.
En su casa también salieron positivas, su esposa e hija, quienes han emprendido una campaña para pagar los gastos médicos que no cubrirá el seguro médico.
TRABAJADORES ESENCIALES
Como el mexicano hay cientos de casos en EEUU, especialmente en la planta Tyson Foods en Oklahoma.
De acuerdo con investigaciones de Telemundo, hay cientos de trabajadores que se están quejando porque no cerraron la compañía, exponiéndolos al contagio.
Entre las quejas de los empleados se mencionan las cuarentenas no pagadas y amenazas de despido.
No es la primera vez que surgen denuncias de los abusos en contra de los trabajadores esenciales, mientras el gobierno no establece un mecanismo para garantizarles protección.
Según estadísticas, son más de 37 mil empleados de plantas de carnes y pollos que han dado positivo al contagio desde marzo que se reportaron los primer casos.
Los latinos confiaron que se sienten vulnerables, a pesar que se han tomado algunas medidas como el uso de mascarillas.
INDUSTRIA
La industria produce en EEUU cerca de cien mil millones de libras de carne y pollo al año y emplea a medio millón de personas directa o indirectamente.
A pesar de los millones que generan, los trabajadores de algunas compañías confiaron a la cadena de noticias que deben comprar sus propios insumos para protegerse del contagio.
Otra persona que resultó infectada en una de las industrias fue Libia Ramírez, quien aseguró que llevó el Covid-19 a su hogar por falta de precaución de la empresa.
¨No nos distanciaron, las personas estaban frente a frente en los comedores llenos¨, agregó la inmigrante latina.
Asimismo, se reveló que las grande compañías no solo exponen a los empleados, sino al consumidor.
¨Si no tiene síntomas regresa a trabajar¨, es la orden de los supervisores que no les importa que algunos productos puedan ir infectados.
