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Un estudio publicado en la revista Pediatric Research, ha demostrado que las composiciones musicales de Wolfgang Amadeus Mozart no solo calman a los bebés, sino que también pueden mitigar el dolor que experimentan durante un análisis de sangre por punción en el talón.
La acción de cantar canciones de cuna es una práctica reconocida para tranquilizar a los recién nacidos, pero este estudio va un paso más allá al introducir la música de Mozart como una herramienta terapéutica.
Los resultados provienen de una investigación realizada con cien lactantes, en la que se encontró que aquellos que escucharon una de las canciones de cuna compuestas por Mozart antes, durante y después del doloroso procedimiento experimentaron una reducción significativa en el dolor y mostraron una recuperación más rápida.
El equipo de investigadores, liderado por el Centro Médico Lincoln de Nueva York, llevó a cabo este estudio durante la "prueba del talón", un análisis de sangre en el pie de los recién nacidos para detectar posibles enfermedades congénitas. Los bebés involucrados en el estudio tenían una edad promedio de dos días y habían nacido después de 39 semanas de gestación.
La prueba del talón es una experiencia incómoda para los bebés, por ello se les administró a todos 0,5 mililitros de solución azucarada dos minutos antes del procedimiento para mitigar el malestar. Sin embargo, se prohibió a los padres abrazar físicamente a los bebés para calmarlos durante la prueba, lo que brindó un entorno controlado para evaluar el impacto de la música de Mozart.
De los cien bebés, 54 escucharon una canción de cuna instrumental de Mozart durante 20 minutos antes, durante y después de la punción del talón. Los resultados fueron reveladores: los bebés que escucharon la música de Mozart mostraron puntuaciones medias de dolor significativamente más bajas durante y después del procedimiento en comparación con aquellos que no fueron expuestos a la música.
La melodía musical pareció tener un efecto calmante en los bebés durante el proceso doloroso. Por lo que, los investigadores sugirieron que la música de Mozart, al ser una intervención fácil de implementar, asequible y reproducible, podría ser una herramienta valiosa para aliviar el dolor en procedimientos menores para recién nacidos sanos.
