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El ejército de Israel lanzó un nuevo golpe al sistema de operaciones de Hezbollah. Esta vez hizo explotar varios walkie-talkies, dejando nueve personas muertas.
La detonación de los dispositivos se dio 24 horas después de las explosiones masivas del sistema de buscapersonas, más conocido como "beepers".
Desde el primer ataque, son 18 las víctimas mortales, entre ellas la hija de uno de los altos líderes del grupo militar respaldado por el gobierno de Irán.
Se estima que la cifra de heridos superó los 2.800, abarrotando los hospitales de la región que han solicitado a la población deshacerse de los "beepers" y otras tecnologías.
Con la explosión de los walkie-talkies son dos los ataques, por medio del hackeo de la tecnología, que se han registrado en el Líbano.
Hasta el momento, Israel no se ha pronunciado sobre su participación en la explosión masiva de dispositivos tecnológicos.
"Israel colocó los explosivos junto a las baterías de cada buscapersonas, así como interruptores de detonación", destacó The New York Time sobre la operación, que ha generado polémica.
Sobre los walkie-talkies, o radiotransmisores o radiocomunicadores, se indicó que habían sido distribuidos para que se organizara a la multitud que asistía a los funerales y marchas.
Información preliminar, recabada por CNN, detalla que fueron más de 20 aparatos que explotaron este miércoles.
Lo anterior, es calificado como un duro golpe al grupo militar que ha prometido tomar represalias en contra de Israel.
