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La boxeadora de Argelia Imane Khelif tuvo una gran noche al llevarse la medalla de oro y el aplauso del público que demostró desde su ingreso quién era la favorita.
El triunfo de la púgil se dio en medio de un escándalo desatado por su identidad de género, la cual fue altamente criticada por sus altos niveles de testosterona en su cuerpo.
Imane Khelif logró derrotar a su rival china Yang Liu, quien también fue señalada por sus niveles de testosteronas, que le dan la fuerza de un hombre.
La boxeadora argelina comenzó a tomar notoriedad mundial tras derrotar en tan solo 45 segundos a su rival italiana, Angela Carini.
Carini denunció que jamás había recibido un golpe tan fuerte, dando a entender que Khelif era una mujer transgénero.
Inmediatamente, las reacciones no se hicieron esperar y personalidades cuestionaron al Comité de los Juegos Olímpicos por permitir la competencia desleal.
La situación tuvo tanta trascendencia que el Comité tuvo que responder a las críticas, asegurando que la Khelif nació mujer, creció como mujer y boxea como mujer.
Todo el revuelo en las redes concluyó el viernes, cuando ganó la medalla de oro y el público le dio uno de los más calurosos reconocimientos, sus aplausos.
Tras recibir la medalla de oro, la polémica boxeadora hizo su característico baile de la victoria.
A pesar del apoyo que obtuvo Khelif en los Juegos Olímpicos, a nivel mundial la realidad es distinta y cientos de personas han esgrimido que no tiene dignidad.
