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El gobierno de Estados Unidos (EEUU) anunció el envío de 700 marines más a Los Ángeles para controlar a los manifestantes, provocando mayores tensiones con el gobernador de California, Gavin Newsom.
El despliegue fue aprobado el lunes por el presidente Donald Trump, con el objetivo de controlar a los manifestantes que continúan sus protestas en contra de las redadas migratorias.
Funcionarios de Trump explicaron que la medida se contempla en El Título 10 del Código que describe el papel de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos. El estamento habla de la intervención cuando se produce una rebelión o peligro de rebelión contra la autoridad del gobierno.
El despliegue de los 700 marines busca ayudar a los agentes a proteger los edificios federales para evitar que sean objeto de vandalismo por los manifestantes.
La autorización del despliegue de la Guardia Nacional es histórica. Desde los años 60 no se había ordenado un hecho similar en Estados Unidos.
Analistas han calificado la medida de Trump como inconstitucional por abusar de su poder y quitarle autoridades al gobernador de Carolina, quien ha denunciado a la administración de Trump.
Este martes, Gavin ha calificado el desplazamiento de los 700 marines como una fantasía desquiciada de un presidente dictatorial. " Los marines estadounidenses han servido con honor en múltiples guerras en defensa de la democracia. Son héroes. No deberían ser desplegados en suelo estadounidense enfrentándose a sus propios compatriotas para cumplir la fantasía desquiciada de un presidente dictatorial".
