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Scarleth Johansson, conocida por su papel en la película "Her", expresó su sorpresa e indignación al descubrir que la voz de la asistente personal Sky era "extrañamente parecida" a la suya.
Después de recibir dos cartas de sus abogados exigiendo detalles sobre el proceso de creación de la voz, OpenAI accedió "a regañadientes" a pausar su uso. La polémica se intensificó cuando el director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman, se refirió a la película "Her", alimentando las comparaciones entre la voz de Sky y la de Johansson en la pantalla grande.
Aunque OpenAI afirmó que la voz de Sky no era una imitación de Johansson, la actriz reveló que Altman la contactó en el pasado para ofrecerle ser la voz de la aplicación, oferta que ella rechazó por motivos personales. Johansson también mencionó que Altman volvió a contactar a su equipo días antes del lanzamiento de ChatGPT, instándola a reconsiderar la oferta.
Ante estas revelaciones, Johansson se vio obligada a contratar a un asesor legal para abordar el tema con OpenAI. Como resultado, la empresa aceptó retirar la voz de Sky. Johansson enfatizó la importancia de proteger el trabajo y la identidad en un momento crítico para el mundo, pidiendo "claridad absoluta" en sus preguntas sobre el proceso de creación de la voz.
La situación plantea importantes cuestiones éticas sobre el uso de la voz y la identidad en la tecnología de inteligencia artificial, destacando la necesidad de un mayor escrutinio y protección en este ámbito.
