La tormenta Sara comenzó a sentirse en Honduras desde la madrugada del jueves, manteniendo en alerta a las autoridades que activaron comités de emergencia para evitar la pérdida de vidas humanas.
De acuerdo con los pronósticos, el fenómeno natural dejó de 100 hasta 200 milímetros de precipitaciones por de 72 horas de lluvias constantes.
Expertos han alertado que la tormenta Sara habría ser catastrófica para los departamentos de Atlántida, Colón, Islas de la Bahía y Gracias a Dios.
Desde que se confirmó que la tormenta tropical, el gobierno de la presidenta Xiomara Castro pidió a las instituciones de emergencia coordinar los trabajos de monitoreo.
En respuesta al mandato de la mandataria, la Comisión Permanente de Contingencia mantiene la alerta roja, verde y amarilla a varias regiones del país, específicamente la zona norte y la zona occidental, donde se experimentarán con mayor fuerza los torrenciales.
"Las fuertes lluvias (por la tormenta Sara) causarán inundaciones y deslizamientos de tierra significativos que amenazan la vida a través de porciones de América Central, particularmente en Honduras, Belice, El Salvador, el este de Guatemala y el oeste de Nicaragua", se informó sobre el paso del fenómeno climatológico.
Los vientos sostenidos de la tormenta tropical son de 65 kilómetros por hora, desplazándose a una velocidad de 19 kilómetros por 12 horas. "El problema es que avanza lento; su paso es casi estacionario".
En ese sentido, se indicó que el paso de la tormenta Sara por Honduras dejará cuatro días críticos en los departamentos costeros, donde se han reportado en menos de 12 horas inundaciones. La Ceiba, Colón e Islas de la Bahía han informado de zonas anegadas en las primeras horas en que el evento meteorológico tocó tierra.
El primer reporte, publicado por los medios locales este viernes, confirma que 587 familias se han visto afectadas y se reportan tres personas desaparecidas a pesar de los llamados de las autoridades.
EN MENOS DE 24 HORAS SE REPORTAN 20 MIL AFETADOS
Miembros de Copeco detallaron que en las primeras horas del fenómeno natural 20 mil personas han resultado afectadas, 86 viviendas dañadas y las precipitaciones continuarán por 54 horas más.