Argentina.- La historia de una joven que intentó rescatar el perro de un indigente ha provocado el rechazo en las redes sociales. Mientras ella creía que sería tratada como una heroína por su hazaña, miles de usuarios han viralizado su historia llamándola ladrona de perros.
Todo comenzó cuando la joven posteó en Twitter su osadía, pidiendo ayuda económica para las vacunas del animal.
Según la joven que se llevó el perro del indigente, escribió: “Recolecta, un chabón muy en cualquiera arrastrando a un cachorrito con correa, le ofrecí comprárselo y me dijo que ni por un auto lo da”.
Posteriormente, asegura que a cinco metros vio que el cachorro se soltó y aprovechó a rescatarlo.
“Vemos el cachorro se suelta de la correa y él no se dio cuenta, lo agarré y salí corriendo. Ahora tengo un cachorro”, agregó.
Inmediatamente, los usuarios comenzaron a insultarla y esgrimirle su acción al robarle el perro al indigente que aseguró que tenía todas sus vacunas y que no le faltaba nada.
“No sé si estaba drogado, borracho o loco, pero no estaba en sí. A mí la verdad me partió el alma, pero no puedo dejar que por lástima tenga a un ser vivo en condiciones deplorables cuando su misma vida corre riesgo”, agregó.
A pesar de sus justificaciones, los ataques por robarse el perro del indigente no cesaron y se hicieron cada vez peor y más cuando relató que tuvo que intervenir la policía.
“Nos dijeron que había alguien que se hacía cargo de las vacunas, una amiga de este hombre, pero no sabía si era verdad. Obviamente entendieron la situación nos dejaron la puerta abierta para irnos”, dijo la joven enfureciendo aún más a sus seguidores.
Una vez que el caso trascendió los medios, la ahora afectada aseguró que solo buscaba el bienestar del cachorrito.
“A mí la verdad me partió el alma, pero no puedo dejar que por lástima tenga a un ser vivo en condiciones deplorables cuando su misma vida corre riesgo“, se justificó la joven.
Por su parte, el indigente a quien le robaron el perro fue entrevistado por un medio local y exigió el retorno de su mascota, la cual le fue arrebatada.
“Lo extraño mucho, es mi compañero. No le falta alimento, agua ni nada. Es juguetón, corre, juega, salta. Juega conmigo, nos reímos juntos. No es fácil conseguir otro, y no es lo mismo un perrito que otro. Creo que me debe estar extrañando”, aseguró.