Foto: Getty images.
Un hombre ha sido condenado a 226 años de prisión por el asesinato de dos mujeres nativas de Alaska, Kathleen Henry y Veronica Abouchuk.
Brian Steven Smith, quien grabó la tortura y muerte de Henry, fue sentenciado tras un juicio que reveló detalles estremecedores de sus crímenes.
Smith, originario de Sudáfrica y naturalizado estadounidense poco antes de cometer los asesinatos, recibió dos sentencias de 99 años por las muertes de Henry, de 30 años, y Abouchuk, de 52 años. Abouchuk fue reportada como desaparecida por su familia en febrero de 2019, siete meses después de haber sido vista por última vez.
El juez del Tribunal Superior de Alaska, Kevin Saxby, al dictar la sentencia, expresó que "ambas mujeres sufrieron un trato extremadamente cruel".
Además, Smith fue condenado a 28 años por otros delitos, como agresión sexual y manipulación de pruebas, ya que en Alaska no se permite la pena de muerte.
Smith no mostró ninguna emoción durante la sentencia, ni cuando el jurado lo declaró culpable tras deliberar durante menos de dos horas. Durante el juicio, las víctimas fueron identificadas solo por sus iniciales, pero Saxby decidió usar sus nombres en la sentencia para restablecer su identidad.
El arresto de Smith en 2019 se produjo después de que una trabajadora sexual robara su teléfono móvil de su camioneta y encontrara imágenes perturbadoras de la tortura y asesinato de Henry. Las imágenes fueron copiadas en una tarjeta de memoria y entregadas a la policía.
Smith terminó confesando haber matado a Henry y a Abouchuk. El cuerpo de Abouchuk fue encontrado antes pero identificado erróneamente.
Ambas mujeres eran nativas de Alaska, provenientes de pequeñas aldeas del oeste del estado, y habían quedado sin hogar en Anchorage.
Las autoridades identificaron a Henry como la víctima cuya muerte fue grabada en el TownePlace Suites by Marriott, en el centro de Anchorage. Smith, que trabajaba en el hotel, se había registrado allí del 2 al 4 de septiembre de 2019.
Durante el juicio, los videos de la tarjeta de memoria fueron mostrados al jurado pero ocultados a la galería. En los videos nunca se veía la cara de Smith, pero se escuchaba su acento sudafricano narrando como si tuviera audiencia.
En los videos, se le escucha insistir a Henry que debería morir mientras la golpeaba y estrangulaba. "En mis grabaciones, todos siempre terminan muertos", menciona en uno de los videos. "¿Qué pensarán mis seguidores de mí? La gente debe reconocer cuándo están siendo testigos de una serie de asesinatos".
En un interrogatorio policial registrado en video, Smith admitió haber asesinado a Abouchuk después de recogerla en Anchorage mientras su esposa estaba fuera de la ciudad. La llevó a su residencia y, tras pedirle que se duchara debido a un olor, y ella negarse, se enfureció, tomó una pistola del garaje y le disparó en la cabeza. Posteriormente, arrojó su cuerpo al norte de Anchorage y notificó a las autoridades sobre el lugar, donde más tarde encontraron un cráneo con una herida de bala.
