La FIFA anunció una reducción significativa en el precio de algunas entradas para la Copa Mundial de 2026, luego de la fuerte reacción negativa de aficionados de todo el mundo. Como parte de este cambio, un grupo limitado de seguidores podrá acceder a boletos desde 60 dólares, incluso para partidos de alto perfil como la final, cuyos precios inicialmente alcanzaban los 4.185 dólares.
El organismo rector del fútbol informó que estas entradas de bajo costo estarán disponibles para cada partido del torneo, que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá. Los boletos serán asignados a las federaciones nacionales de los equipos participantes, que se encargarán de distribuirlos entre aficionados considerados fieles, es decir, aquellos que han acompañado a sus selecciones en partidos previos, tanto de local como de visitante.
La FIFA denominó esta nueva categoría como “Supporter Entry Tier”, aunque aclaró que la cantidad de boletos disponibles será reducida y se contará por cientos, no por miles. Según la organización, la medida busca respaldar a los hinchas que viajan regularmente para apoyar a sus selecciones durante el torneo.
La Copa Mundial de 2026 será la primera en contar con 48 selecciones, y se espera que genere ingresos superiores a los 10.000 millones de dólares. Sin embargo, el anuncio inicial de precios provocó indignación, ya que las entradas más económicas —que oscilaban entre 120 y 265 dólares para algunos partidos de la fase de grupos— excluían a los equipos participantes y contradecían compromisos previos de ofrecer boletos accesibles.
Las críticas también se intensificaron por el uso de precios dinámicos, cargos adicionales y una plataforma oficial de reventa, prácticas comunes en el entretenimiento estadounidense pero poco habituales en el fútbol internacional. Además, generó molestia que los aficionados que compraran paquetes completos no recibieran reembolsos hasta después del torneo.
La decisión marca un intento del organismo por calmar el descontento y reconectar con los seguidores, en un torneo que promete ser histórico tanto por su formato como por su impacto económico.