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En su último discurso desde el Despacho Oval, el presidente Joe Biden reflexionó sobre sus logros al frente de la Casa Blanca, a pesar de enfrentarse a un nivel de aprobación históricamente bajo. Según una reciente encuesta, solo el 36% de los adultos en Estados Unidos aprueba su gestión, lo que iguala el punto más bajo de popularidad durante su mandato.
Desde el icónico escritorio Resolute, Biden enfatizó la importancia de una transición pacífica de poder hacia el gobierno entrante de Donald Trump, expresando preocupación por las "fuerzas poderosas y sus influencias descontroladas" que, según él, amenazan a la democracia estadounidense. “No debemos ceder ante aquellos que buscan sacrificar nuestro futuro”, declaró el mandatario.
Mientras tanto, Trump permaneció activo en su red social, Truth Social, donde celebró el reciente acuerdo entre Israel y Hamas para liberar a los rehenes retenidos en Gaza. "¡Tenemos un acuerdo para los rehenes en el Medio Oriente! Serán liberados pronto. ¡Gracias!", escribió el expresidente, quien también destacó que este avance no habría sido posible sin su elección como próximo presidente.
Biden reconoció el acuerdo en su discurso, destacando que pone fin a 15 meses de sufrimiento y agradeció los esfuerzos de negociación llevados a cabo en los últimos meses. Confirmó que los términos del plan serán implementados principalmente por la administración de Trump. "En estos días recientes, hemos hablado como un solo equipo", afirmó Biden, subrayando la importancia de la unidad en momentos cruciales.
El intercambio de comentarios entre ambos líderes reflejó una transición de poder marcada por tensiones políticas y desafíos globales. Mientras Biden cerraba su presidencia con llamados a proteger el futuro democrático del país, Trump celebraba el inicio de una nueva etapa bajo su liderazgo.
