Imagen cortesía. 
El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, ha intensificado su postura internacional al acusar públicamente a Israel de practicar un “exterminio” contra el pueblo palestino.
En un llamado ante el Congreso, demandó la aprobación urgente de una ley que exija el embargo de armas al Estado israelí debido a las graves violaciones de derechos humanos en Gaza.
La iniciativa surge luego de nuevas informaciones sobre el impacto humanitario del conflicto Israel-Palestina, donde desde octubre de 2023 se reportan miles de víctimas civiles. Sánchez ha solicitado que España y la Unión Europea suspendan la exportación de material militar hacia Israel mientras persista la ofensiva en la Franja de Gaza.
"La aprobación urgente de un real decreto ley que consolide jurídicamente el embargo de armas a Israel… y que establezca la prohibición legal y permanente de comprar y vender armamento, munición y equipamiento militar a Israel", dijo el líder político español.
Por su parte, Israel acusa a España de antisemitismo y ha prohibido la entrada a la vicepresidenta Yolanda Díaz.
La decisión se produce como respuesta a declaraciones recientes de Díaz sobre la situación en Palestina, lo que ha llevado a un incremento en la disputa entre ambos gobiernos.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel justificó la medida asegurando que las recientes declaraciones de la política española promueven un discurso "antisemita" y atentan contra las relaciones bilaterales.
Escalada de declaraciones y reacciones internacionales
La polémica surge en un momento de creciente presión internacional sobre Israel debido a sus operaciones en Gaza.
La postura del gobierno español, junto con la de otros países europeos, se ha endurecido en los últimos meses, instando al cumplimiento del derecho internacional humanitario.
Este incidente se suma a una serie de desencuentros recientes que han puesto en entredicho la cooperación entre ambos estados.
