El presidente electo de Estados Unidos (EEUU), Donald Trump, y el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, se reunieron para hablar sobre la seguridad global.
El encuentro se concretó en Palm Beach, Florida, el pasado viernes. Ambos líderes hablaron ampliamente de la importancia de garantizar la paz en el mundo y fomentar alianzas.
El encuentro se confirmó por medio de un escueto comunicado de prensa publicado este sábado y replicado por la prensa, sin brindar mayores detalles del alcance de las pláticas.
"Discutieron problemas de seguridad global que enfrenta la alianza", detalla el documento emitido para la opinión pública.
El jefe de la OTAN había expresado con anterioridad su deseo de reunirse con Trump para abordar temas de interés común, como la guerra entre Ucrania y Rusia y el conflicto en Oriente Medio.
"Espero sentarme con el presidente Trump y analizar cómo colectivamente nos aseguremos de enfrentar esta amenaza", dijo Rutte el 8 de noviembre.
La reunión de Trump y Mark despertó los rumores de una profunda admiración del jefe de la OTAN hacia el magnate, lo que podría interferir en decisiones futuras.
Durante el primer mandato de Trump, Rutte mantuvo buenas relaciones con el magnate; este aspecto ha instado a los analistas a avizorar que la seguridad global estaría garantizada si mantienen esa misma relación diplomática.
Mark es conocido como "Teflon Mark" por su capacidad para mantenerse en el poder, logrando ser primer ministro de Países Bajos en el 2021.
Una de las diferencias entre el líder de la OTAN y Trump es armar a Ucrania para que combata a Rusia, contrario al magnate que ha anunciado que dejará de financiar al gobierno de Volodimir Zelenski.