Imagen de archivo, cortesía. 
La preocupante cifra de muertes por hambre en Gaza aumenta mientras continúa la ofensiva israelí en la región. Autoridades sanitarias locales han informado que al menos 113 personas han perdido la vida por desnutrición en la Franja de Gaza, evidenciando las graves consecuencias humanitarias del conflicto.
El Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamas, alertó que la crisis humanitaria se agrava principalmente en el norte del enclave palestino.
Los hospitales, además de atender a heridos de los bombardeos, informan de un aumento de menores, mujeres y ancianos que ingresan por severa desnutrición y falta de acceso a alimentos básicos.
El impacto humanitario de la escasez de alimentos
Organizaciones internacionales, como la ONU, han advertido que la falta de suministros y los obstáculos en la distribución de ayuda humanitaria ponen en riesgo la vida de miles de civiles en Gaza.
Según informes recientes, más de la mitad de los habitantes de la Franja podrían enfrentar niveles críticos de inseguridad alimentaria si no se garantiza el acceso seguro y regular de ayuda.
En ese sentido, expertos en derechos humanos insisten en la importancia de un cese al fuego inmediato para que ingresen con fluidez alimentos y medicinas esenciales.
La ONU ha exhortado a ambas partes a respetar los corredores humanitarios y evitar el uso de la hambruna como “arma de guerra”.
