La captura de Ismael “El Mayo” Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa, ha dejado a la opinión pública y a los expertos con una serie de preguntas sin respuesta y teorías sobre cómo se ejecutó su traslado de México a Estados Unidos. La captura fue resultado de un complejo operativo en el que participaron diversas figuras del mundo del narcotráfico, como Joaquín “El Chapo” Guzmán y su familia, Los Chapitos.
Según el periodista Luis Chaparro, en entrevista para el programa "Me lo dijo Adela" con Adela Micha, la captura de Zambada fue posible gracias a un elaborado plan en el que incluso “El Chapo” habría tenido un rol decisivo. Antes de su última captura, Guzmán sugirió a sus hijos negociar su salida del narcotráfico y reiniciar sus vidas lejos de ese mundo. Esta propuesta finalmente se implementó tras la captura de Ovidio Guzmán López, otro de sus hijos. Como parte de este plan, Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo”, cultivó una relación cercana con Zambada para ganarse su confianza y coordinar una “reunión” que derivaría en su captura.
El encuentro se programó para el 25 de julio de 2024 en la zona de Huertos del Pedregal en Sinaloa. La supuesta reunión de mediación política involucraba al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, y al político Héctor Melesio Cuén Ojeda. Convencido de que se trataba de un asunto de seguridad para la región, Zambada acudió al evento, confiando en la lealtad de sus aliados. Sin embargo, al llegar al lugar, fue secuestrado y trasladado de inmediato a Estados Unidos en un vuelo encubierto.
Chaparro reveló que el traslado se efectuó en un avión especial de Homeland Security, clasificado como "covert" o encubierto, diseñado para evitar ser rastreado. Estos aviones, empleados en operaciones de alto riesgo, no registran sus rutas en sistemas comerciales y están destinados a misiones que requieren extrema discreción.
En medio de las especulaciones, Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, aseguró que no se realizó un operativo policial en suelo mexicano para capturar a Zambada. También insistió en que el avión y el piloto involucrados no pertenecían al gobierno estadounidense. El embajador subrayó la colaboración entre ambos países en esta operación, considerándola una "victoria conjunta".
Por su parte, el titular de la Fiscalía General de la República, Alejandro Gertz Manero, confirmó el secuestro de Zambada y afirmó que Estados Unidos ha entregado parte de la información requerida sobre el vuelo y el traslado del capo. Aunque el gobierno estadounidense aún debe proporcionar ciertos datos adicionales, Gertz Manero señaló que estos detalles, aunque no cruciales, son de gran utilidad para completar la investigación.
A medida que avanza la investigación, la captura de Zambada sigue generando polémica y cuestionamientos sobre el papel de México y Estados Unidos en el combate al narcotráfico.