En mayo de 2022, se excavó un colosal esqueleto de dinosaurio de 11 pies de altura, apodado "Apex", en las cercanías de la actual Dinosaur, Colorado. Con una impresionante longitud de 27 pies de la cabeza a la cola, este espécimen es el más grande de su tipo recuperado hasta la fecha.
Además, Apex es uno de los esqueletos más completos jamás encontrados, con casi el 80% de sus huesos recuperados.
Ken Griffin, fundador del fondo de cobertura Citadel y con una fortuna de $38.3 mil millones, superó a otros seis postores para adquirir el esqueleto. Planea prestarlo a diversas instituciones para su exhibición, pero con prioridad para mantenerlo en Estados Unidos. "Apex nació en América y se quedará en América", afirmó Griffin en un comunicado de prensa tras su adquisición.
Griffin no es ajeno a financiar fósiles. En 2018, donó $16.5 millones al Field Museum de Chicago para financiar una exhibición táctil del dinosaurio más grande jamás descubierto. También ha sido nombrado uno de los 200 principales coleccionistas de arte del mundo, con una colección valorada en $1 mil millones. Un tiranosaurio casi completo llamado "Rex" se consideraba anteriormente uno de los esqueletos más caros tras venderse por $31.8 millones en una subasta de Christie's en 2020.
La colección de Griffin continuará creciendo a medida que busque preservar artefactos cada vez más eclécticos en Estados Unidos. En noviembre de 2021, gastó $43.2 millones en una de las 13 copias conocidas de la primera edición de la Constitución de los EE. UU., porque su hijo se lo pidió. Griffin también explicó que quería preservarla para su exhibición pública en América, al igual que su razón para adquirir el estegosaurio.
En mayo de 2022, Griffin ganó dos asientos en el vuelo espacial de Blue Origins, los cuales donó a dos maestros de escuelas públicas de la ciudad de Nueva York.