Foto: Infobae.
La aerolínea internacional Air New Zealand ha anunciado que llevará a cabo un estudio de seguridad aérea en el que solicitará a los pasajeros voluntarios que se pesen antes de abordar los vuelos internacionales que salgan de Auckland.
Esta medida tiene como objetivo mejorar la seguridad de los aviones y es realizada cada cinco años a petición de la Autoridad de Aviación Civil.
Según un comunicado emitido por la aerolínea Air New Zealand, se espera que más de 10.000 viajeros, junto con su equipaje de mano, participen en este estudio.
Los pasajeros voluntarios podrán pesarse en básculas especiales instaladas en las puertas de acceso a las terminales, y los datos se recogerán de forma anónima en el Aeropuerto Internacional de Auckland.
Es importante destacar que este estudio se vio interrumpido durante varios años debido a la pandemia de COVID-19. Sin embargo, la aerolínea ha retomado este proyecto para continuar trabajando en la mejora de la seguridad aérea.
Air New Zealand ya llevó a cabo estudios similares en 2015 para vuelos internacionales y en 2021 para vuelos domésticos. En esta ocasión, la aerolínea ha asegurado a los pasajeros que “no se mostrará públicamente su peso”.
Reconocen que subirse a una báscula puede resultar abrumador para algunas personas y, por lo tanto, se garantiza que no habrá ninguna pantalla visible en ningún lugar.
Actualmente, la entidad ha designado un peso promedio de 86 kilos para personas mayores de 13 años, incluyendo el equipaje de cabina.
El estudio que realizará Air New Zealand permitirá recopilar datos actualizados sobre el peso de los pasajeros y contribuirá a una mejor comprensión de las necesidades de seguridad aérea.
Estos hallazgos podrían influir en futuras regulaciones y políticas relacionadas con el peso de los pasajeros y su impacto en la seguridad de los vuelos.
