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Un par de las famosas zapatillas de rubí que Judy Garland usó en la icónica película El Mago de Oz fue vendido el pasado sábado por la asombrosa suma de 28 millones de dólares, casi dos décadas después de haber sido robadas de un museo.
El misterio sobre el paradero de las zapatillas se resolvió cuando el FBI las recuperó en 2018. Martin, de 77 años, no fue identificado públicamente como el responsable del robo hasta su acusación formal en mayo de 2023. Más tarde, en octubre del mismo año, admitió su culpabilidad. En enero pasado, fue sentenciado a tiempo cumplido debido a su delicado estado de salud, ya que dependía de una silla de ruedas y un tanque de oxígeno.
La casa de subastas Heritage Auctions, con sede en Dallas, había estimado que las zapatillas podrían alcanzar los 3 millones de dólares o más, pero la subasta en vivo superó todas las expectativas. En cuestión de segundos, las ofertas triplicaron la cifra inicial, dando lugar a una intensa competencia que se prolongó durante 15 minutos.
Participantes en línea y por teléfono se enfrascaron en una reñida disputa por adquirir este emblemático objeto cinematográfico. Finalmente, un comprador anónimo aseguró las zapatillas por un precio total de 32.5 millones de dólares, incluyendo los honorarios de la casa de subastas.
Las zapatillas, que forman parte del vestuario más emblemático de Hollywood, habían desaparecido tras un robo hace casi 20 años. Este redescubrimiento y su venta marcan un hito en la historia de los objetos coleccionables relacionados con el cine.
Con esta venta récord, las zapatillas de rubí consolidan su estatus como uno de los artefactos más valiosos y reconocidos de la cultura cinematográfica mundial.
