Los raptos exprés en Tegucigalpa, Distrito Central, a bordo de taxis ha vuelto a aterrorizar a los ciudadanos, especialmente a las mujeres que utilizan ese servicio.
Esta mañana una joven universitaria fue atacada por un ruletero que se desvió de camino para poder despojarla de sus pertenencias.
La víctima relató que se subió a la unidad porque miró a una señora y pensó que no representaba ningún peligro.
Minutos después el taxista buscó un área solitaria para perpetrar el atracó, quitándole su teléfono celular y varias tarjetas de crédito.
“Me pidieron todo, si no me iban a matar”, dijo la estudiante con su voz entrecortada por los nervios.
El viernes, una joven decidió lanzarse de un taxi, luego que este la raptó junto con su madre para asaltarlas.
La policía, no ha realizado capturas por ambos sucesos que están causando terror en la ciudad.