Según el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur, Corea del Norte efectuó un disparo que aparenta ser un proyectil balístico de largo alcance desde la zona de Pyongyang hacia las aguas de su costa oriental.
La Guardia Costera de Japón informó que el lanzamiento tuvo lugar a las 9:59 a. m. hora local y se preveía que el proyectil cayera en el Mar de Japón, conocido también como Mar del Este, aproximadamente a las 11:13 a. m. Se advirtió a los barcos en la zona de impacto prevista que estén atentos y tomen precauciones mientras se espera más información.
Este lanzamiento se produce después de que Pyongyang hiciera una amenaza a principios de esta semana, advirtiendo que derribaría aviones de reconocimiento militares estadounidenses que volaran sobre las aguas cercanas al Mar del Este.
Kim Yo Jong, una destacada funcionaria norcoreana y hermana del líder Kim Jong Un, acusó a un avión de espionaje estadounidense de haber ingresado a la zona económica exclusiva del Norte en al menos ocho ocasiones el lunes, según un comunicado emitido el martes por la agencia estatal de noticias norcoreana KCNA.
"En caso de repetidas intrusiones ilegales, las fuerzas estadounidenses enfrentarán graves consecuencias", advirtió Kim en el comunicado.
El lanzamiento del misil y la retórica agresiva, aunque no son poco comunes en Pyongyang, ocurren en un momento de crecientes tensiones mientras Washington y Seúl intensifican su cooperación en defensa, y los líderes de Corea del Sur, Japón y Estados Unidos se reúnen en Lituania para una cumbre de la OTAN en la que Corea del Norte también está en la agenda.
Según un comunicado emitido en la reunión de la OTAN el martes, se instó a Corea del Norte a renunciar a sus programas de misiles balísticos y armas nucleares, los cuales violan las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que los prohíben.
El comunicado expresa: "Hacemos un llamado a Corea del Norte para que acepte las repetidas propuestas de diálogo presentadas por todas las partes involucradas, incluyendo Japón, Estados Unidos y la República de Corea".
Sin embargo, Corea del Norte no ha mostrado indicios de estar dispuesta a entablar negociaciones con Washington o Seúl.
Leif-Eric Easley, profesor asociado de Estudios Internacionales en la Universidad Femenina Ewha en Seúl, indicó que la declaración agresiva de Kim Yo Jong hacia los aviones de vigilancia de Estados Unidos sigue un patrón característico de Corea del Norte, que consiste en exagerar las amenazas externas para generar apoyo interno y justificar sus pruebas de armas.
Easley agregó que Pyongyang también selecciona cuidadosamente el momento de sus exhibiciones de fuerza para perturbar lo que considera como una coordinación diplomática en su contra. En este caso particular, buscaba interrumpir la reunión de los líderes de Corea del Sur y Japón durante la cumbre de la OTAN.
El mes pasado, en conmemoración del 73° aniversario del inicio de la Guerra de Corea, decenas de miles de norcoreanos marcharon en manifestaciones en Pyongyang en contra de Estados Unidos. Los participantes denunciaron a Estados Unidos como una fuerza destructora de la paz y la estabilidad en la península de Corea, y advirtieron sobre el riesgo de una guerra nuclear, según informó KCNA.
Mientras tanto, Corea del Sur, Estados Unidos y Japón han estado llevando a cabo ejercicios militares conjuntos y trilaterales con el objetivo de disuadir cualquier amenaza militar proveniente de Corea del Norte.