El paso de Beryl por el Atlántico ha alertado a los expertos de una temporada de huracanes agitada que pondría en peligro a miles de personas durante su trayectoria.
De acuerdo con los meteorólogos, el primer huracán de la temporada rompió récords que generan preocupación por lo que está por venir.
"Normalmente, la actividad de tormentas de principio de temporada no nos dice mucho sobre lo que sucederá el resto del tiempo", dijeron los expertos sobre la creación de tormentas que no han sido tan potentes como Beryl que en cuatro días se convirtió en huracán de categoría 5.
Al parecer, Beryl solo es el presagio de una temporada de huracanes bastante agitada que dejaría daños catastróficos.
"Cuando las tormentas son fuertes en el Atlántico tropical y el caribe oriental, tienden a ser un presagio de una temporada muy agitada", dijeron investigadores de la Universidad de Colorado.
En ese sentido, se explicó que la temporada más activa tiende a comenzar a mediados de agosto, alcanzando su pico en septiembre. "Beryl se formó a inicios de julio, se comportó como si ya hubiera llegado a peor época".
Sobre la temporada de huracanes agitada que se avizora se explicó que las temperaturas del agua extremadamente calientes provocan que las tormentas se conviertan en potentes ciclones antes de tiempo.
"Beryl se intensificó más rápido que cualquier otra tormenta registrada a principios de la temporada, cuando sus vientos aumentaron 104 km/h en solo 24 horas", agregaron los expertos.
Se destacó que en el mundo se verán más fenómenos similares debido a la contaminación de los océanos.