Una fiscal del distrito judicial de Nuevo México (EE. UU), formalizó la acusación de los cargos de homicidio involuntario en contra del actor y productor Alec Baldwin, por la muerte de la directora de fotografía, Halyna Hutchins, quien falleció de un disparo mortal en el set de filmación de "Rust”.
La fiscal Mary Carmack-Altwies, en el escrito de acusación enumeró una serie de fallos de seguridad y alegó que Baldwin conocía el protocolo, ya que había participado en más de 40 películas en las que se usaron armas de fuego.
Asimismo, agregó que la armera del set, Hannah Gutiérrez-Reed, debería haber estado presente para comprobar que el arma era segura y no confiar en el ayudante de dirección, David Halls, porque “no tenía potestad para autorizar el uso del revólver”.
Sin embargo, el abogado de Alec Baldwin, Luke Nikas, expresó en su declaración: “Él confió en los profesionales con los que trabajaba, quienes le aseguraron que el arma no tenía balas vivas. Lucharemos contra estos cargos y ganaremos”.
Baldwin ha sostenido que no sabía que el arma que disparó durante un ensayo contenía una bala real y su abogado calificó la decisión de los fiscales como “un terrible error judicial”.
“Esta decisión distorsiona la trágica muerte de Halyna Hutchins y representa un terrible error judicial. El señor Baldwin no tenía motivos para creer que había una bala viva en el arma, ni en ninguna parte del set de filmación”, añadió.
Por otra parte, la fiscal afirmó que Baldwin debió haber recibido una mínima formación sobre la utilización de armas de fuego, pero que no la cumplió porque “la mayoría del tiempo estuvo hablando por el móvil con su familia”.
De esta manera, Baldwin y Gutiérrez-Reed podrían enfrentarse ahora a un juicio penal que podría costarles cinco años de cárcel y la resolución podría tardar hasta 60 días.