La policía de Miami indicó que no pedirá documentos migratorios a quienes detengan en operativos, para que la comunidad no pierda la confianza.
Con la decisión, los agentes no acatarán la orden del gobernador de Florida, Ron DeSantis, quien ha emprendido una férrea persecución en contra de los indocumentados.
“No vamos a pedir ningún documento para tratar de confirmar su estado legal”, dijo el representante de la Policía de Miami, Alberto Zabaleta.
Agregó que no tiene pensado ir en contra de las víctimas, refiriéndose a los indocumentados. “Para nosotros, una víctima es una víctima desde el principio hasta el final”.
Zabaleta señaló que el director del Departamento de Policía de Miami – Dade no quiere perder la confianza de la comunidad.
No es la primera vez que el Departamento de Policía se opone a las medidas implementadas por DeSantis. En el pasado han extendido un llamado a los inmigrantes a perder el miedo a denunciar hechos delictivos por su condición.
A pesar de la neutralidad de la Policía de Miami, empresarios tienen temor de la fuga de mano de obra por la nueva ley.
El dueño de la empresa de floricultura, Kevin Costello señaló que muchos migrantes están experimentando miedo y ansiedad.
La severa legislación además contiene multas y revocación de licencias a las empresas que no aseguren la legalidad migratoria de todos sus trabajadores.
Asimismo, se les pide a las autoridades policiales no aceptar licencias de conducir emitidas a indocumentados en otros estados.