Neuralink, la innovadora startup de implantes cerebrales fundada por Elon Musk, ha anunciado la apertura de solicitudes para que un segundo participante pruebe su dispositivo en un ensayo humano, según anunció el multimillonario en su cuenta de X.
La convocatoria surge cinco meses después de que Neuralink implantara su primer chip cerebral en un ser humano, Noland Arbaugh, un hombre de 30 años que quedó tetrapléjico tras un accidente de buceo en 2016, sin embargo, el implante presentó una falla técnica reciente por lo que la compañía ha hecho ajustes para mejorar su funcionamiento.
El primer participante del ensayo, Noland Arbaugh, ha experimentado un cambio significativo en su vida gracias al implante. Este dispositivo le permite controlar el cursor de una computadora con su cerebro, una habilidad que transformó su perspectiva diaria.
"Antes no tenía razones para levantarme cada mañana, pero esto ha cambiado por completo mi vida", afirmó Arbaugh en una entrevista con Good Morning America. "Me siento muy contento de formar parte de algo que considero tan trascendental. Este es el siguiente paso para brindar ayuda a personas con parálisis".
Sin embargo, Neuralink admitió que los hilos que conectan el chip al cerebro de Arbaugh se habían retraído, afectando su rendimiento. Aunque este contratiempo fue significativo, la compañía aseguró que se han realizado ajustes para mejorar el funcionamiento del dispositivo.
Neuralink está ahora en búsqueda de más participantes como Arbaugh para continuar con sus ensayos clínicos. "Si tiene cuadriplejía y desea explorar nuevas formas de controlar su computadora, lo invitamos a participar en nuestro ensayo clínico", publicó la empresa en X.
El objetivo de Neuralink es lograr utilizar implantes para conectar cerebros humanos a computadoras, facilitando que personas con parálisis puedan controlar dispositivos electrónicos con sus pensamientos, y en el futuro, ayudar a personas ciegas a recuperar la vista.
Al igual que las interfaces cerebro-máquina existentes, el implante de Neuralink recoge señales eléctricas del cerebro y las traduce en acciones específicas.
Los participantes actuales del ensayo forman parte del Estudio PRIME (Precise Robotically Implanted Brain-Computer Interface), cuyo propósito es evaluar la seguridad del implante y del robot quirúrgico, además de probar la funcionalidad del dispositivo.
Durante el ensayo, los chips son implantados quirúrgicamente en la parte del cerebro que controla la intención de moverse. Posteriormente, el chip registra y envía señales cerebrales a una aplicación, con el objetivo inicial de permitir a los participantes controlar el cursor o el teclado de una computadora usando únicamente sus pensamientos.
Aproximadamente un mes después de la operación, Musk anunció que Arbaugh podía controlar el ratón de una computadora con su cerebro, y más tarde, la compañía publicó un video de Arbaugh jugando ajedrez en una computadora utilizando solo su mente.
El problema técnico que afectó al dispositivo de Arbaugh, y que redujo su capacidad de procesamiento de datos y rendimiento, fue un golpe difícil para él. "Fue muy, muy difícil renunciar a todas las cosas maravillosas que pude hacer", dijo en la entrevista.
No obstante, Neuralink considera que estos desafíos son una parte crucial del proceso de desarrollo. "La razón por la que realizamos ensayos clínicos y ensayos de viabilidad iniciales es descubrir este tipo de problemas lo antes posible antes de que se comercialicen", explicó DJ Seo, cofundador de Neuralink junto a Musk.
A pesar de estos avances, el acceso generalizado a la tecnología de Neuralink no será inmediato. Antes de que los implantes cerebrales de la compañía estén disponibles en el mercado, necesitarán obtener una aprobación regulatoria más amplia.