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La futbolista española Jennifer Hermoso compareció hoy ante un juzgado en Madrid para prestar declaración a puerta cerrada en relación con el caso de agresión sexual contra el expresidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales.
La situación surgió tras un incidente ocurrido el pasado agosto, cuando Rubiales besó a Hermoso después de la victoria de la selección española femenina en la Copa del Mundo.
La audiencia comenzó puntualmente a las 10:00 hora local, con la presencia de Jennifer Hermoso, quien llegó al juzgado aproximadamente diez minutos antes del inicio de la vista, la cual fue evacuada en presencia de un juez de instrucción de la Audiencia Nacional y está en sus manos la decisión de enviar el caso a juicio.
Luis Rubiales enfrenta dos cargos, uno por presunta agresión sexual y otro por supuestas coacciones, derivadas de su intento, según la acusación, de presionar a Hermoso para que afirmara que el beso fue consensuado. Este anuncio fue hecho por un fiscal de la Audiencia Nacional poco antes de las vacaciones de Navidad.
Además de Rubiales, otros tres hombres, incluido el exseleccionador del equipo femenino y dos funcionarios de la federación, también enfrentan cargos por presunta coacción, según informó la fiscalía.
Tanto Rubiales como los demás acusados han negado categóricamente las imputaciones en declaraciones previas ante el juez en los meses anteriores, según la fiscalía del tribunal.
El polémico beso, que tuvo lugar en el estadio mientras los futbolistas españoles recibían sus medallas de la Copa del Mundo, fue transmitido a nivel mundial y generó una inmediata protesta en España y a escala internacional.
Por el momento, se está a la espera de la resolución judicial, que determinará si los cargos presentados tendrán consecuencias legales para los involucrados.
