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La historia de un “Noé africano” que decidió construir ocho arcas para sobrevivir a un gran diluvio ha llamado la atención en redes sociales y medios internacionales.
Este ingenioso hombre, oriundo de una comunidad rural, diseñó y construyó con sus propias manos refugios flotantes inspirados en la historia bíblica de Noé.
Su objetivo principal era salvaguardar tanto a su familia como a animales y vecinos de las constantes inundaciones que amenazan cada año a diversas zonas africanas.
El “Noé africano”: inventiva ante el cambio climático
El fenómeno de lluvias intensas y repentinas, vinculado en parte al cambio climático, ha sido devastador para varias comunidades africanas.
Inspirado en relatos antiguos y motivado por experiencias personales de pérdidas materiales, este explorador local utilizó materiales disponibles para fabricar ocho embarcaciones, capaces de albergar a varias personas y animales durante emergencias.
Según información compartida por medios internacionales, sus acciones han sido admiradas en redes sociales, donde lo han apodado como el “Noé moderno”.
Al mismo tiempo, expertos y vecinos reconocen el impacto positivo de su iniciativa en la seguridad y preparación colectiva ante nuevas catástrofes naturales.
La creatividad del “Noé africano” plantea preguntas sobre los desafíos del cambio climático y la importancia de la autoprotección en contextos vulnerables.
