El Distrito Escolar de Los Ángeles se ha dado a la tarea de alimentar a miles de personas que sufren los efectos del coronavirus por el aislamiento que han mermado el poder adquisitivo de las masas.
La iniciativa de las escuelas tienen como objetivo alimentar a los niños encerrados en sus hogares recolectando y distribuyendo comida.
Los camiones escolares en áreas rurales dejan las cajas de alimentos en paradas de autobuses, donde las familias se agrupan para donar o recolectar los insumos.
“A cualquiera que llegue buscando comida, estamos asumiendo que la necesita, se la vamos a proporcionar”, dijo uno de los organizadores.
Son 80 distritos escolares con más de 3,600 voluntarios que brindan un servicio alimenticio, según las directivas estatales.