Este fin de semana, Taylor Swift cerró con broche de oro The Eras Tour en Canadá, culminando una gira histórica que la llevó a ofrecer 149 espectáculos en 51 ciudades a lo largo de 21 meses. Entre los hitos de este recorrido, la artista debutó en Argentina, donde realizó tres conciertos en el estadio Más Monumental con localidades completamente agotadas, dejando una marca imborrable en su público sudamericano.
El impacto económico de la gira ha sido tan impresionante como su éxito artístico. Según The New York Times, la venta de entradas generó un asombroso ingreso de 2.077.618.725 dólares, el doble de cualquier gira anterior en la historia de la música. Este logro consolida a The Eras Tour como un fenómeno global que ha redefinido los estándares de la industria del entretenimiento.
El alcance de esta gira es monumental. Más de 10 millones de personas asistieron a los conciertos, con un precio promedio de entrada de 204 dólares, significativamente superior a la media del sector. La noche con mayor asistencia tuvo lugar en Melbourne, Australia, donde 96,006 fanáticos vibraron con la música de Swift, mientras que sus ocho presentaciones en el estadio de Wembley, en Londres, atrajeron a más de 750,000 personas, casi igualando la población de una ciudad como Seattle.
El éxito no se limitó a las entradas. La venta de mercancías oficiales, como camisetas y sudaderas, generó tanto entusiasmo que en algunos lugares los puestos abrieron un día antes del espectáculo. Esta estrategia permitió a miles de fanáticos adquirir productos exclusivos, incluso sin tener boletos para el concierto.
Con The Eras Tour, Taylor Swift no solo ha roto récords, sino que también ha establecido un nuevo paradigma en la industria, demostrando cómo la música puede trascender fronteras y unir a millones de personas en torno a una experiencia inolvidable.