Dormir acompañado no siempre es sinónimo de armonía en la pareja. Factores como el ronquido o la disputa nocturna por las sábanas pueden afectar la calidad del sueño y, en algunos casos, la relación misma. Sin embargo, una acción tan simple como dormir desnudos podría marcar la diferencia en la felicidad de una pareja.
Un estudio realizado por Cotton USA encuestó a 1,004 británicos sobre sus hábitos de sueño y la satisfacción en sus relaciones. Los resultados revelaron que el 57% de las parejas que duermen sin ropa declararon ser felices en su relación, en comparación con el 48% de quienes usan pijama, el 43% de los que optan por camisones y solo el 38% de los que duermen con onesies.
Si bien el estudio no establece una relación causal directa entre la desnudez y la felicidad, expertos como Stephanie Thiers-Ratcliffe de Cotton USA sugieren que dormir sin ropa promueve la intimidad y la conexión emocional, lo que podría fortalecer el vínculo de pareja. Además, otros estudios respaldan la importancia del contacto físico durante el sueño. Investigaciones de la Universidad de Hertfordshire encontraron que las parejas que duermen a menos de una pulgada de distancia son más felices que aquellas que mantienen un espacio mayor a 30 pulgadas. Además, el 94% de las parejas que mantienen contacto físico mientras duermen afirmaron estar satisfechas con su relación, en comparación con solo el 68% de aquellas que duermen sin tocarse.
El profesor Richard Wiseman, experto en psicología del sueño, señala que la distancia física en la cama puede ser un reflejo del distanciamiento emocional durante el día. En este sentido, si una pareja que solía dormir abrazada comienza a distanciarse en la cama, podría ser una señal de alerta en la relación.
En conclusión, la forma en que compartimos la cama con nuestra pareja podría influir en la felicidad y conexión emocional. Aunque cada relación es única, dormir desnudos podría ser un pequeño cambio con grandes beneficios para fortalecer el vínculo amoroso.