Geólogos en China han quedado sorprendidos tras el hallazgo de un yacimiento de oro "supergigante" en la provincia de Hunan, cuyo valor se estima en más de 82 mil millones de dólares. Este descubrimiento, que incluye más de 1,000 toneladas de oro, ha generado gran expectación tanto a nivel local como internacional.
Según informaron medios estatales, la enorme reserva fue localizada en el campo de oro de Wangu, en el condado de Pingjiang, donde se han identificado más de 40 vetas de oro, cada una con aproximadamente 300 toneladas de este preciado metal. Además, se han detectado otros 1,000 toneladas de oro en un área de aproximadamente dos millas de extensión.
Chen Rulin, autoridad en prospectos de minerales del Instituto Geológico de China, afirmó que los núcleos de roca perforados mostraron evidentes trazas de oro. Esta revelación se suma a una serie de hallazgos recientes en China, incluido el descubrimiento de una nueva especie humana que logró sobrevivir a un periodo glaciar, lo que resalta la capacidad del país para hacer descubrimientos significativos tanto en el ámbito geológico como arqueológico.
China, que es el mayor productor de oro del mundo, representa alrededor del 10% de la oferta global. Aunque su producción de oro es considerable, el consumo interno supera la capacidad minera del país, lo que ha llevado a un aumento en las importaciones de oro desde países como Australia y Sudáfrica.
En 2022, la minería de oro en China alcanzó las 403 toneladas, y para finales de 2023 se estima que se han extraído un total de 234,332 toneladas de oro a lo largo de la historia de la humanidad, según el Consejo Mundial del Oro. La mayor parte de esta extracción ha ocurrido después de 1950.
El hallazgo en Hunan refuerza el creciente interés de China en acumular oro, especialmente en un contexto internacional donde países como China y Rusia han intensificado su acopio de reservas de oro tras las sanciones económicas impuestas a Rusia por la invasión de Ucrania. A pesar de su uso limitado en la industria, el oro sigue siendo considerado un refugio seguro para los inversores frente a posibles crisis económicas, manteniendo su atractivo a lo largo de los siglos.