El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, confirmó que infiltró personas a territorio ruso para poder destruir los 41 bombarderos en una central aérea a distancias de la zona de guerra.
De acuerdo con Zelenski, una vez que se concretó la "Operación Telaraña" todo el personal implicado fue retirado del país enemigo, poniendo a salvo a los héroes de guerra que burlaron toda la seguridad rusa.
El líder ucraniano fue claro al indicar que los combatientes estaban en diferentes regiones rusas en tres zonas horarias diferentes que facilitaron la destrucción de los aviones, dejando una pérdida de más de 7,000 millones de dólares.
"Nuestra operación de más largo alcance. Nuestro personal implicado en la preparación de la operación fue retirado a tiempo del territorio ruso", explicó Zelenski sobre la destrucción de los 41 bombarderos.
Además, confirmó que la exitosa operación, que tardó un año, seis meses y nueve días en llevarse a cabo y causarle un golpe moral y económico al gobierno de Putin.
"Ucrania se está defendiendo, y con razón: estamos haciendo todo lo posible para que Rusia sienta la necesidad de poner fin a esta guerra. Rusia empezó esta guerra, Rusia debe terminarla", dijo Zelenski.
La Operación Telaraña se ejecutó desde la línea del frente a más de 4,300 kilómetros de distancia. Hasta el momento, se desconoce cuál será la respuesta de Rusia.
"Ucrania dañó aviones rusos valorados en 7,000 millones de dólares, estacionados en la base aérea a miles de kilómetros de distancia", se indicó sobre el golpe económico que recibió el ejército de Putin.