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On ha presentado las Cloudboom Strike LS, unas zapatillas revolucionarias hechas por un robot, que prometen mejorar el rendimiento en los próximos Juegos Olímpicos de París 2024. Estas zapatillas, sin cordones y más ligeras que un iPhone, están diseñadas para ser más adaptables, dinámicas y ofrecer un soporte superior en comparación con las zapatillas de running tradicionales. Con un precio de US$ 330, las Cloudboom Strike LS han mostrado su valía cuando la corredora keniana Hellen Obiri, medallista de plata olímpica y campeona mundial, ganó el Maratón de Boston 2024 con un par de estas zapatillas. Obiri volverá a usarlas para competir en París este verano.
La sede de On, ubicada en Zurich, atribuye el éxito de estas zapatillas a una combinación de biomecánica, fisiología y su extremada ligereza. Con un peso de solo 170 gramos por zapatilla en una talla 8.5 de EE.UU. para hombre, son 100 gramos más ligeras que muchas otras zapatillas de running populares de la misma talla. Ilmarin Heitz, director sénior de innovación de On, comentó en un video promocional que su principal objetivo es que los atletas ganen, y este es su indicador de éxito.
Estas zapatillas, con un diseño sin talón, cordones ni lengüeta, tienen una apariencia translúcida y de calcetín, lo que les da un aspecto único. Johannes Voelchert, el inventor, se inspiró en una pistola de pegamento caliente con temática de Halloween que disparaba telarañas decorativas. Presentó su idea en la Feria de Diseño de Milán, donde captó la atención de On. La parte superior de la zapatilla está hecha de un termoplástico que se colorea y se marca en tres minutos usando un brazo robótico. Esta se rocía de una sola vez y se une a la suela de fibra de carbono y goma espuma mediante calor, sin necesidad de pegamento.
On afirma que esta tecnología reduce las emisiones de carbono en la producción de la parte superior de la zapatilla en un 75% en comparación con otros modelos. Marc Maurer, co-CEO de On, mencionó que el material LightSpray tiene el potencial de llevarnos hacia un futuro más sostenible y circular.
No es la primera vez que se experimenta con textiles en aerosol. En 2022, la casa de moda francesa Coperni sorprendió al rociar un vestido a medida sobre la modelo Bella Hadid en la Semana de la Moda de París. Además, las fibras en aerosol se han utilizado en la industria de la belleza para ocultar calvas y cabello ralo.
Con los Juegos Olímpicos a la vuelta de la esquina, se espera que muchos atletas adopten esta innovadora tecnología para mejorar su rendimiento en las competencias.
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