El relato de los testigos cooperantes que vinculan al abogado Juan Orlando Hernández con presuntos narcotraficantes ya fue aprobado en el Distrito Sur de Nueva York, Estados Unidos, según fuentes entrevistas por la cadena internacional de noticias, Univisión.
La investigación de Univision, cita a la exfiscal federal Jessica Ortiz, quien detalló que “la práctica en el Distrito Sur de Nueva York a menudo ha sido que los testimonios de los cooperantes se corroboran de varias formas” y que el relato de estos testigos mencionados en el caso de Tony Hernández, ya fue aprobado “y es poco probable que dichas acusaciones se realicen sin alguna forma adicional de corroboración”.
La cadena internacional señala que la participación de Hernández en conspiración fue corroborada tanto por el exalcalde Alexander Ardón como por otro testigo cooperante anónimo, identificado como un exoficial de la policía hondureña.
Para el exfiscal del Distrito Sur y alto funcionario del FBI, Nick Lewin, “la decisión de nombrar a un presidente en funciones como coconspirador” requiere una aprobación a alto nivel y no se toma a la ligera. Ellos pudieron nombrarlo como un funcionario anónimo o con un seudónimo, sin embargo es vinculado directamente.
"Sabiendo qué se toma en cuenta para identificar a alguien o no, esto me parece un acto significativo y deliberado", opinó el exfiscal.
Implicaciones contra Juan Orlando Hernández son serias
Lewin, explicó a Univisión, que la designación CC (coconspirador) tiene implicaciones serias, porque para vínculos de menor grado se utilizan seudónimos como cargos del gobierno, sin embargo est no implica que sea objeto de enjuiciamiento futuro.
“El nombramiento de una persona como coconspirador en un caso criminal no significa que la persona será necesariamente objeto de un futuro enjuiciamiento. La carga de la prueba es menor que la que se requiere para un enjuiciamiento. Por lo tanto, muchos coconspiradores nunca son acusados”, cita Univision en su publicación.
De levantarse cargos en contra de Hernández por conspiración de tráfico de drogas la fiscalía de New York tiene un plazo de prescripción de cinco años que se extienden desde que acaba la conspiración.
En este caso, la fecha de finalización parece caer en 2016 o 2017, según la evidencia presentada por los fiscales hasta el momento.
Eso significaría que éstos tendrían que presentar cargos contra cualquier cómplice antes de 2022 a más tardar, tomando en cuenta que el período actual de Hernández termina en enero de 2022, y el año antes de esa fecha, en Honduras se celebraría un proceso electoral para elegir nuevo presidente.
Los señalamientos en contra del actual gobernante hondureño se hizo de conocimiento público tras desclasificarse documentos de la Fiscalía de Nueva York, publicados posteriormente en el medio internacional.