Una gigantesca ola de nubes ha recubierto Venus por 35 años

Una gigantesca ola de nubes ha recubierto Venus por 35 años

El planeta es conocido por ser el más cálido del sistema solar, con una temperatura en superficie de 465 grados y cubierto con un mando de nubes de gotas de ácido sulfúrico que se mueven a gran velocidad.

Venus Foto: Javier Peralta/JAXA-Planet C team
  • Daniel Umanzor | 07-08-2020.2:18 pm.

Un artículo publicado en la revista Geophysical Research Letters, ha revelado que una gigantesca “ola” de nubes ha estado cubriendo el planeta Venus durante 35 años sin que ningún astrónomo se diera cuenta.

El planeta es conocido por ser el más cálido del sistema solar, con una temperatura en superficie de 465 grados y cubierto con un mando de nubes de gotas de ácido sulfúrico que se mueven a gran velocidad.

El sorprendente descubrimiento fue hecho gracias a la misión Akatsuki, de la agencia Espacial Japonesa (JAXA, por sus siglas en japonés). Dicha misión ha orbitado el planeta Venus durante los últimos 10 años. En 2016, la sonda avistó, por primera vez, lo que parecía ser una onda atmosférica que se extendía por sobre el planeta.

Para observar mejor el fenómeno JAXA utilizó el telescopio infrarrojo de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA), el cual esta ubicado en Hawai, y se centró en las capas inferiores y medias de la atmósfera de Venus.

El fenómeno, que en ocasiones puede llegar a extenderse 7,500 kilómetros a través del ecuador de Venus, podría ser una de las explicaciones de la generación de energía necesaria para la superrotación atmósférica, que es otro fenómeno que se puede observar en el planeta. Y es que, mientras que Venus tarda 243 días en dar una sola vuelta, su atmósfera lo hace 60 veces más rápido.

Javier Peralta, investigador de la agencia espacial japonesa dijo a Efe que “hemos hallado un fenómeno en las nubes profundas de Venus que es candidato serio a transportar energía desde esa parte profunda hacia alas nubes más altas, zona en la que los vientos de la superrotación son más veloces”.

Peralta explicó que Venus está cubierta totalmente de una capa espesa de nubes y es bastante difícil ver lo que ocurre en la parte más profunda del grueso manto. Las nubes más profundas están a unos 50 kilómetros de la superficie del planeta y las más altas a unos 70 kilómetros.

Gracias a la misión Akatsuki y sus dos cámaras se ha podido ver lo que pasa en las capas más profundas con mucha resolución. Hasta ahora solo se habían podido hacer observaciones, con peor resolución, desde telescopios terrestres.