El caso de la desaparición de Madeleine McCann ha arrojado nueva información que revela que antes de que la niña desapareciera en Portugal, se estaba tramando un plan para secuestrar a un pequeño y vendérselo a una pareja sin hijos.
La última revelación proviene de Ken Ralphs, un antiguo activista político del Reino Unido, quien ha sacado a la luz detalles perturbadores sobre los días previos a la desaparición de Maddie.
Según Ralphs, Christian Brückner, el principal sospechoso en el caso de secuestro de la niña, intentó reclutar a un amigo en común para llevar a cabo el plan.
El testimonio de Ralphs, compartido con Sky News, revela sobre la interacción entre Brückner y su amigo, quien se encontraba en una situación vulnerable en ese momento, viviendo en un lugar remoto de la costa del Algarve.
De acuerdo con Ralphs, Brückner estaba al tanto de la precaria situación de su amigo y buscaba tomar provecho de eso para llevar a cabo sus retorcidos planes.
"Una noche estábamos sentados alrededor del fuego después de comer, nos tomamos unas cervezas y de madrugada mi amigo empezó a llorar", relató Ralphs a Sky News. "Me confesó que se había aliado con Christian para robar un niño de Praia da Luz a una familia adinerada de Alemania".
El amigo de Ralphs, cuyo nombre se mantiene en anonimato por motivos legales, quería viajar al extranjero, pero no contaba con el dinero suficiente para comprar los tickets de avión.
Según el medio britanico, Ralps le aconsejó a su amigo que no se involucrara y se ofreció a ayudarle económicamente. “Le advertí que no podía involucrarse en el secuestro de una persona para pedir rescate, es ridículo”, a lo que él respondió: “no, no es así”.
El pasado junio, otro testigo clave en el caso, Helge Busching, compartió detalles inquietantes sobre el material que descubrió en posesión de Brückner años después de la desaparición de Madeleine.
En una entrevista con el diario alemán Bild, Busching relató cómo, tras un encuentro fortuito con Brückner, se vio envuelto en un robo a la casa del sospechoso, durante el cual descubrieron una serie de vídeos perturbadores.
Estos videos mostraban actos de abuso sexual contra mujeres de edad avanzada y menores, algunos de los cuales Busching estimó que tenían alrededor de 13 años.
La descripción de Busching de los eventos es escalofriante. "Estaba atada desnuda a una viga", dijo sobre una de las víctimas.
Lo que hace que estos testimonios sean aún más inquietantes es la aparente indiferencia de Brückner hacia sus propios actos. Según Busching, durante una conversación en España en 2008, Brückner hizo un comentario sobre la desaparición de Madeleine McCann, dejando entrever su posible implicación. "No entiendo cómo la pequeña ha podido desaparecer sin dejar rastro", dijo Brückner según el relato de Busching.
El caso de Madeleine McCann sigue siendo uno de los misterios sin resolver más desconcertantes, a medida que surgen nuevos testimonios y pruebas, se espera que la búsqueda de justicia para Maddie y sus seres queridos continúe.