Osos polares en estado salvaje. Un depredador poderoso y una especie vulnerable o potencialmente en peligro de extinción.
El presidente estadounidense, Donald Trump, aprobó este lunes un plan para permitir la perforación de petróleo y gas en el Refugio Nacional de Vida Silvestre de Ártico de Alaska
Con la finalización del plan se encamina a emitir contratos de arrendamiento de décadas en el área virgen antes de las eleciones del 3 de noviembre.
La aprobación se logró luego que los republicanos apoyarán un proyecto ley de impuestos en el 2017 que abrió en área al arrendamiento de petróleo y gas.
El plan en el refugio silvestre de Alaska es considerado un pilar clave de la agenda de Trump para impulsar la producción de petróleo en la nación.
El gobernador de Alaska, Michael Duleavy, detalló que los trabajos petroleros en la zona aportarán a la creación de empleos y será un impulso a la economía del Estado.
Se explicó que la producción de gas en el refugio silvestre podría comenzar en ocho años y extenderse por 50 años más.
En el lugar de área virgen se alberga una población de vida silvestre, incluidos el caribú purcoespín y los osos polares que estarían en peligro de extinción. La zona ha estado fuera del alcance de la perforación durante décadas.
Representantes demócratas, grupos ecologistas y pobladores han calificado la medida como un regalo a las grandes petroleras que dañarían el ecosistema único del Ártico y los pueblos nativos.
El refugio silvestre que está en peligro consta de 19 millones de acres (7,7 millones de hectáreas) y ambientalistas han prometido lanzar un desafío legal para evitar los trabajos.
EEUU produce actualmente aproximadamente 500 mil barriles por día de petróleo crudo, frente a más de 2 millones de bpd en 1988.
Cifras del Departamento de Energía revelan que la producción del petróleo en Alaska se ha reducido en las últimas tres décadas.
