Un grupo bipartidista compuesto por 14 fiscales generales de distintos estados de EEUU ha presentado una serie de demandas contra TikTok, acusando a la popular plataforma de redes sociales de haber “generado adicción” entre los jóvenes y de afectar su salud mental.
Las demandas se centran en varios aspectos cuestionables de TikTok, como su flujo interminable de contenido, los videos de “desafíos” que a veces fomentan comportamientos arriesgados y las notificaciones nocturnas que, según los fiscales generales, interrumpen el sueño de los menores. Las acciones legales han sido interpuestas de forma independiente por los miembros de la coalición, co-liderada por la fiscal general de Nueva York, Letitia James, y su homólogo de California, Rob Bonta.
Esta iniciativa legal se suma a la creciente presión que enfrenta TikTok, que también se encuentra en medio de un proceso legislativo que podría llevar a su prohibición en EE.UU. el próximo año, así como a una demanda del Departamento de Justicia por la supuesta recolección ilegal de datos de niños, entre otras acciones estatales.
En junio, el gobernador de Nueva York promulgó una ley destinada a regular los algoritmos de las redes sociales, que exigirá a las plataformas mostrar contenido en orden cronológico a los usuarios menores de 18 años. Esto podría obligar a TikTok a reestructurar su funcionamiento. Además, el mes pasado, 42 fiscales generales solicitaron al Cirujano General de EE.UU., Vivek Murthy, que se etiquetaran las aplicaciones de redes sociales con advertencias sobre su posible daño a los jóvenes.
En respuesta a las acusaciones, Alex Haurek, portavoz de TikTok, manifestó: “Nosotros discrepamos firmemente con estas afirmaciones, muchas de las cuales consideramos inexactas y engañosas. Estamos orgullosos del trabajo que hemos realizado para proteger a los adolescentes y seguiremos actualizando y mejorando nuestro producto.” Haurek también destacó que TikTok ha colaborado con los fiscales generales durante más de dos años y expresó su decepción ante la decisión de estos de proceder con la demanda.
Sin embargo, los fiscales generales argumentan que el modelo de negocio de TikTok se centra en maximizar el tiempo que los jóvenes pasan en la plataforma, lo que les permite aumentar sus ingresos a través de la venta de anuncios dirigidos. En este sentido, la demanda presentada por James sostiene que TikTok “sabe que el uso compulsivo de su plataforma está devastando la salud mental de millones de niños y adolescentes en EEUU”.
La demanda también critica los llamados “filtros de belleza” de TikTok, que manipulan las imágenes de los usuarios, a menudo haciendo que parezcan más delgados o como si estuvieran usando maquillaje. Según el documento legal, estos filtros pueden fomentar comparaciones sociales negativas y contribuir a problemas de imagen corporal entre los adolescentes.
Asimismo, se alega que los “desafíos” virales en TikTok pueden incentivar comportamientos peligrosos. Un caso destacado en la demanda menciona la trágica muerte de un adolescente en Brooklyn que intentó realizar un truco conocido como “subway surfing”, lo que resalta los riesgos asociados con el contenido en la plataforma.
Además, la demanda acusa a TikTok de violar la Ley de Protección de la Privacidad Infantil en Línea (COPPA) al no impedir que los menores de 13 años se unan a la aplicación y al recolectar su información personal sin el consentimiento parental.
El litigio busca imponer sanciones financieras a TikTok, incluyendo la exigencia de que la plataforma devuelva cualquier ganancia obtenida de anuncios dirigidos a adolescentes o preadolescentes en Nueva York.