"El potente terremoto causó la destrucción de barrios enteros, templos, carreteras, puentes, aeropuertos, vías férreas y hospitales", se informó sobre la magnitud del sismo en Birmania. / Imagen cortesía.
La junta militar en Birmania confirmó, hasta el momento, la muerte de 1,700 personas por el terremoto de magnitud 7.7 grados que azotó el viernes el país.
Mientras los militares aseguran que en el país se han recuperado 1,700 cadáveres, el movimiento opositor al golpe de Estado reveló que son más de 2,400 víctimas las que se han reportado en 78 horas de trabajos de rescate.
Aunque las cifras no coinciden, ambos han hecho llamados para coordinar trabajos de rescate de decenas de personas que se encuentran atrapadas entre los escombros.
De acuerdo con la junta militar, los trabajos de socorro se han obstaculizado por las altas temperaturas, dificultando que algunos ciudadanos sean sacados del amasijo de hierro y cemento con vida.
Imágenes satelitales han revelado, que no solo la muerte de 1,700 personas ha llenado de luto y dolor el país; la infraestructura quedó parcialmente destruida, lo que será difícil volver a construir por la pobreza del país, que atraviesa una grave crisis política.
"El potente terremoto causó la destrucción de barrios enteros, templos, carreteras, puentes, aeropuertos, vías férreas y hospitales", se informó sobre la magnitud del sismo en Birmania.
La nación, tomada por el ejército, ha solicitado ayuda internacional, algo que ha generado preocupación porque es la primera vez desde que tomaron en poder por las armas, en el 2021, que permite que países apoyen a la nación.
China, Rusia, India y Reino Unido enviaron ayuda humanitaria y equipo de rescate para ayudar con los trabajos de socorro.
