Los talibanes están aumentando la frecuencia de las redadas en las áreas donde se reúnen los adictos, lo que ha llevado a cientos de usuarios a refugiarse en condiciones precarias en Kabul.
Antes de que los talibanes entraran en Kabul el 15 de agosto, la policía de la capital arrestaba a los adictos y los trasladaba al centro.
Ahora los combatientes talibanes armados con rifles M16 y AK-47 los obligan a subir a una ambulancia para llevarlos a un centro de rehabilitación.
Durante su estadía de 45 días en el centro, los hombres pasan su tiempo acostados en grandes dormitorios o acorralados en el patio.
Para algunos la estadía en Ibn Sina solo será un cambio de escenario pero, no es suficiente para dejar su dependencia a las drogas.
A los adictos se les rapa la cabeza , se les da una túnica y se les da un paquete de champú pero no hay toallas.
No hay suficiente metadona , el tratamiento para ayudar a los adictos a dejar el opio y la heroína, y no hay nada para eliminar los dolores de abstinencia de los que están dejando la metanfetamina.
El cultivo de amapola fue prohibido bajo el último gobierno de los talibanes en la década de 1990, pero la exportación de heroína de las áreas controladas por los talibanes proporcionó a los intransigentes miles de millones de dólares durante su insurgencia contra Estados Unidos y el gobierno respaldado por Occidente.
Con amapolas baratas y fáciles de cultivar, Afganistán proporciona alrededor del 90 por ciento de la producción mundial de heroína.
También ha aumentado la producción de metanfetamina cristalina, creada a partir de la planta de efedra que crece de forma silvestre en el país.
Según expertos antinarcóticos, el 11 por ciento de los 34 millones de habitantes de Afganistán son consumidores de drogas, con un cuatro a un seis por ciento adictos.
Desde su regreso al poder, los talibanes prometieron no permitir la producción de narcóticos.
El centro de rehabilitación Ibn Sina está ubicado en una antigua base militar estadounidense y su personal trabaja sin remuneración ya que no se han pagado los salarios durante cuatro meses debido a la situación económica del país.