Un reciente estudio publicado en The Lancet advierte que más de 39 millones de personas podrían morir en los próximos 25 años debido a infecciones causadas por bacterias resistentes a los antibióticos. Este problema, considerado uno de los mayores desafíos para la salud global, se agrava conforme los patógenos desarrollan mecanismos que les permiten evadir los tratamientos antimicrobianos.
El estudio es el primero en evaluar la evolución a largo plazo de la resistencia a los antibióticos, mostrando que, de 1990 a 2021, más de un millón de personas murieron anualmente por esta causa. Aunque las muertes de niños menores de cinco años han disminuido gracias a mejores medidas de control y prevención, el envejecimiento de la población ha provocado un aumento significativo de muertes en adultos mayores de 70 años.
Las infecciones provocadas por el estafilococo dorado son las que más han aumentado globalmente. Los investigadores advierten que, para 2050, la resistencia a los antibióticos podría causar directamente 1,9 millones de muertes anuales, un 67% más que en 2021. En total, se estima que entre 2025 y 2050, la resistencia a los antibióticos estará relacionada con 169 millones de fallecimientos.
Sin embargo, los expertos señalan que una mejora en el tratamiento de infecciones y un mayor acceso a los antibióticos podrían prevenir 92 millones de muertes, especialmente en regiones vulnerables como el sudeste asiático y África subsahariana.