Shoji Morimoto, el hombre que gana 80 mil dólares al año por simplemente estar presente

Shoji Morimoto, el hombre que gana 80 mil dólares al año por simplemente estar presente

El japonés Shoji Morimoto rompe con las normas convencionales al emprender un negocio inusual: recibe dinero por "no hacer nada".

japon Foto: Shutterstock
  • Karla Alvarez | 14-01-2025.8:46 pm.

En un mundo que celebra el trabajo arduo y la productividad, Shoji Morimoto, un japonés de 41 años, ha construido una carrera inusual que desafía estas normas. Desde 2018, se dedica a ofrecer su compañía como "persona de alquiler", un servicio único que le permite ganar alrededor de 80,000 dólares anuales simplemente estando presente en momentos cotidianos de sus clientes.

Conocido como el "Rental Person" (persona de alquiler), Morimoto no da consejos, no juzga ni interviene, sino que simplemente acompaña a quienes lo contratan. Su propuesta se ha vuelto un fenómeno cultural en Japón, acumulando más de 4,000 solicitudes. Desde compartir un café hasta asistir a eventos importantes, su rol es ser una presencia neutral y reconfortante.

Morimoto decidió emprender este camino tras ser criticado en su empleo anterior por no tomar la iniciativa. Transformó lo que otros veían como una debilidad en su mayor fortaleza: una compañía libre de expectativas. Entre sus experiencias más notables, ha acompañado a personas durante comidas, ha asistido a eventos sociales y ha estado presente mientras una mujer entregaba papeles de divorcio a su esposo. “La cliente dijo que se sintió más segura con alguien conocido cerca, aunque fuera en silencio”, relató Morimoto.

El impacto emocional de su trabajo ha generado reflexiones profundas tanto en él como en sus clientes. “Me sorprende que tanta gente encuentre satisfacción en alquilar a alguien que no hace nada”, comentó en una entrevista. Muchos encuentran alivio en su presencia, ya que pueden compartir pensamientos y emociones sin temor a ser juzgados.

En su libro, Morimoto cuestiona la obsesión por la productividad y valora el simple acto de existir. Inspirado por experiencias personales, como la pérdida de su hermana, quien no pudo encontrar su lugar en el mundo laboral, enfatiza que el valor de una persona no debe medirse por su desempeño.

Aunque no sabe cuánto tiempo podrá continuar con este estilo de vida, Shoji Morimoto disfruta del impacto que genera. Para él, estar presente para otros, incluso sin hacer nada, tiene un significado poderoso. Su historia es un recordatorio de que, en ocasiones, lo más valioso que podemos ofrecer es simplemente nuestra compañía.

El sake japonés ha sido incluido en la lista de patrimonio cultural de la UNESCO