Eric Miller/Reuters
Miles de manifestantes se han congregado en diferentes ciudades en EEUU protestando por la muerte de el hombre afroamericano, George Floyd luego de que murió a manos de un agente policial que durante más de 8 minutos puso su rodilla en el cuello del hombre hasta asfixiarlo. Floyd estaba, esposado, desarmado e indefenso y en todo momento pidió por su vida diciendo que no podía respirar.
En Minneapolis se registró la cuarta noche de protestas que han derivado en el incendio de varios edificios, saqueos y enfrentamientos con la policía. Este sábado las autoridades se vieron obligadas a imponer toque de queda.
En Atlanta cientos de manifestantes, se hicieron presentes en cerca de la oficinas centrales de CNN, las turbas rompieron ventanas de algunos comercios, la policía antidisturbios respondió con gases lacrimógenos. Los manifestantes lanzaron piedras contra el edificio de CNN varios carros de policía también fueron el blanco de la ira de los ciudadanos que quemaron al menos dos de ellos.
Otra de las ciudades fue Washington donde se registró una manifestación frente a la Casa Blanca que produjo la detención de dos personas derivada de altercados con algunos agentes del Servicio Secreto. La protesta se disipó en horas de la madrugada.
También se han reportado manifestaciones en Brooklyn, Nueva York; Charlotte, Carolina del Norte y Houston, Texas.
El viernes las autoridades de Minneapolis autorizaron el despliegue de 500 elementos de la Guardia Nacional, como un intento para restablecer el orden. “Nuestras tropas están entrenadas para proteger la vida, preservar la propiedad y garantizar el derecho de las personas a manifestarse pacíficamente”, dijo Jon Jenses, general a cargo de la Guardia Nacional en Minnesota.
