Sayed Sadaat, el exministro afgano que se refugió en Alemania y reparte comida para vivir

Sayed Sadaat, el exministro afgano que se refugió en Alemania y reparte comida para vivir

Sayed Sadaat, era el ministro de Comunicación del gobierno afgano. Llegó a Alemania con la esperanza de desempeñarse como profesional de informática y telecomunicaciones. Ahora reparte comida, pero lo hace con dignidad.

Sayed Sadaat, el exministro afgano que se refugió en Alemania y reparte comida para vivir Imágenes cortesía. Al Jazeera / Reuters.
  • Jacqueline Alvarenga | 27-08-2021.12:19 pm.

La historia de Sayed Sadaat,  el exministro de Comunicación afgano que dejó su país para refugiarse en Alemania y ahora reparte comida en una bicicleta para vivir se ha viralizado en las redes sociales.

Su vida dio un giro total el año pasado, cuando decidió salir de su país; pasando de ser parte del gobierno de Afganistán a un empleado de una empresa de comida en Leipzig.

A pesar de contar con 20 años de experiencia laboral en informática y telecomunicaciones, no le fue fácil conseguir un empleo que le permitiera desempeñar su rama de estudio.

Sayed Sadaat de 49 años de edad dejó Afganistán en el 2020 con la esperanza de conseguir un futuro mejor luego de tener desacuerdo con el gobernante depuesto de la nación.

Las fotografías del exministro y ahora repartidor de comida circulan en las redes sociales y han sido replicada por medios nacionales e internacionales, convirtiéndose en tendencia rápidamente.

De acuerdo con el exfuncionario, parte del gabinete del expresidente Ashraf Ghani en 2018, pero renunció a su cargo en 2020 debido a diferencias con el mandatario, quien hoy se encuentra asilado en Emirato Árabes tras huir de los talibanes.

Según Sayed Sadaat, muchas personas lo critican por su nuevo empleo, ya que aseguran que pasó de ser un funcionario respetado a un empleado común en Alemania. Para el ciudadano afgano eso no es importante y no se arrepiente de haber dejado su cargo hace un año. “No tengo nada de qué sentirme culpable”.

Destacó que a pesar de contar con dos maestrías no se avergüenza de su trabajo, el cual desempeña dignamente.

“No me avergüenzo de mi trabajo y no me siento inferior. No creo que los afganos se avergüencen de tener un exministro trabajando, pero sí estarían avergonzados si recibiera dinero social”, dijo Sayed Sadaa.

Indicó que una de sus limitantes fue que desconocía el idioma y que ahora dedica cuatro horas diarias para poder dominar el alemán, lo que le abrirá nuevas puertas.

La historia del exministro afgano ha traspasado las fronteras, su relevancia se deriva del conflicto que se vive en Afganistán luego que los talibanes asaltaran el poder.