El gobierno ruso ha sido contundente al indicar que el plan del alto al fuego de 30 días propuesto por Estados Unidos (EEUU) no llena sus expectativas de acabar con la guerra, como se habló en un principio.
Con las declaraciones, el gobierno de Vladimir Putin ha puesto en duda la propuesta planteada por el secretario de Estados de EEUU, Marco Rubio, a Ucrania, país que aceptó la tregua de 30 días con el objetivo de recuperar el apoyo militar.
La postura de Rusia se dio a conocer tras la llegada a Moscú del enviado especial estadounidense, Steve Witkoff, quien busca acercamientos para concretar las negociaciones que iniciarían con el alto al fuego de 30 días.
"Le expliqué nuestra postura de que esto no es más que un respiro temporal para el ejército ucraniano y nada más", dijo el asesor ruso, Yurik Ushakov, en la reunión con Witkoff.
Agregó que el objetivo de Rusia es una paz a largo plazo que beneficie a ambas naciones. "Creemos que nuestro objetivo es una solución pacífica a largo plazo. Eso es lo que perseguimos".
Es la primera vez que Rusia se muestra en contra del plan, exactamente por el corto plazo de la tregua. Expertos han señalado que posiblemente EEUU no tiene una estrategia específica y solo busca ganar tiempo.
La decisión de Rusia de no respaldar el alto al fuego de 30 días coincide con las declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, quien dijo que por experiencia su país no confía en Occidente.
"La experiencia con Occidente nos ha enseñado a no creer en su palabra ni en sus promesas, sino a juzgar a partir de acciones prácticas concretas", dijo Lavrov al hablar futuras negociaciones.