La nadadora Riley Gaines demandó a la atleta transgénero Lia Thomas por hacer trampa en la competencia femenina y por exponer sus genitales en el vestuario.
Gaines exige dos millones de dólares por el actuar de Thomas, a quien hace unos meses, además de tramposa, llamó arrogante.
Las diferencias entre ambas se han venido marcando desde que Thomas ingresó a las competencias de la Universidad y logró vencer a una nadadora olímpica.
“Se informa que la nadadora presentó una demanda oficial de dos millones contra Thomas por hacer trampa y exponer sus órganos masculinos en el vestuario de mujeres”, se informó.
El proceso legal en contra de la nadadora transgénero está basado en la falta de consensos con las atletas femeninas.
“No nos advirtieron de antemano que compartiríamos un vestuario con Lia. No dimos nuestro consentimiento, no pidieron nuestro consentimiento, pero en ese vestuario nos dimos la vuelta, y hay un hombre biológico de 6’4 bajándose los pantalones y viéndonos desnudarse”, dijo Gaines.
Medios deportivos han calificado las diferencias como una acalorada rivalidad entre ambas nadadoras.
Riley no solo ha criticado a Lia por la inclusión, sino también al presidente Joe Biden por los cambios en el Título IX.
Antes que se conociera la demanda contra Thomas por hacer trampa, la nadadora trans calificó de transfóbicas a sus compañeras mujeres biológicas por oponerse a que compita.
“Están usando el disfraz del feminismo para impulsar creencias transfóbicas”, acotó sobre la negativa de que continúen compitiendo con ellas.
El debate ha sido tal, que la Federación Internacional de Atletismo, anunció que los atletas transgéneros no podrán competir en categoría femenina en pruebas internacionales.