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La tendencia de llevar a cabo cirugías estéticas en las mascotas para dar forma redondeada a sus orejas, asemejándolas a las del icónico personaje de Disney, Mickey Mouse, ha generado controversia en China. Este procedimiento ha suscitado críticas de quienes lo consideran maltrato animal y están demandando su prohibición. Por un costo de 300 yuanes (42 dólares), una clínica veterinaria en la ciudad de Chongqing está promocionando operaciones grupales de "orejas de Mickey" como una oferta especial para celebrar el Año Nuevo chino, según informa el diario South China Morning Post.
Esta práctica, que por el momento es legal en China, se lleva a cabo en dos etapas: la primera implica una cirugía bajo anestesia que consiste en recortar quirúrgicamente y redondear las orejas de la mascota, mientras que la segunda fase se centra en ajustar la forma para mantenerlas erguidas. Sin embargo, defensores de los animales y expertos en el área están exigiendo la prohibición de este tipo de intervenciones debido al daño físico y a las posibles secuelas psicológicas que pueden causar a los animales, especialmente a perros y gatos.
A pesar de haberse convertido en una tendencia, Liu Yudong, responsable del centro veterinario Loving Care International de Beijing, señaló que este procedimiento rara vez se realiza en clínicas veterinarias de grandes ciudades, aunque sí es más común en criaderos. Liu subrayó que él y sus colegas se oponen firmemente a este tipo de cirugías, ya que consideran que su principal responsabilidad profesional es velar por el bienestar de los animales.
Varios expertos veterinarios también han alertado sobre los riesgos para la salud física y mental de las mascotas, desde los peligros de la anestesia hasta la posibilidad de que los animales desarrollen comportamientos autolesivos debido al dolor, según advirtió Chen Young, del hospital veterinario Lianhe en la ciudad de Shenzhen. Además de las críticas de los expertos, numerosos usuarios chinos en internet han condenado esta moda de las "orejas de Mickey Mouse". Algunos han expresado fuertes críticas, sugiriendo que si a los dueños les parece tan adorable, deberían hacerse cortes en sus propias orejas, mientras otros consideran esta práctica como "abuso animal, no amor".
